Hoy por la mañana un nutrido grupo de delegados y militantes del Sindicato de Empleados de Comercio de Lomas de Zamora, copó el ingreso a la sucursal Lomas del conocido mayorista Gran Tornado. Las reiteradas denuncias realizadas por el gremio, a pesar del reconocimiento de la situación por parte del Ministerio de Trabajo, parecen no hacer mella en una empresa que ha decidido ignorar los más elementales derechos laborales consagrados por la ley. “El Sr. Javier Marino, Gerente de Relaciones Laborales, compromete con su irresponsable acción a toda la empresa, boicoteando lo que debería ser un espacio de diálogo entre los trabajadores y el sector empresario a fin de resolver los problemas planteados”, expresó visiblemente molesto Rubén Crosta, Secretario General de los mercantiles lomenses. “El hostigamiento contra las compañeras y compañeros afiliados al gremio ya no admite paciencia alguna. Un compañero fue suspendido y dos más apercibidos por hechos descaradamente inventados. No se pagan horas extras ni feriados, amenazan a los empleados con despidos obligándolos a trabajar más allá de la jornada laboral y hasta el Ministerio de Trabajo encontró empleados en negro al realizar la inspección. ¿Hasta dónde debemos ser pacientes los trabajadores?”, continuó Crosta frente al local de la empresa donde los bombos no dejaban de sonar.
La pregunta retórica del Secretario General le agrega tensión a una relación que parece no encontrar el rumbo. “La profunda desigualdad que hoy caracteriza a nuestro país, produce este tipo de situaciones donde siempre hay una parte que intenta abusar de sus privilegios. Hoy los mercantiles de Lomas de Zamora dijimos basta, también debe haber tolerancia cero para los empleadores que no cumplen la ley”, concluyó Rubén Crosta.
